Llevamos tiempo trabajando intensamente para paralizar la tramitación del Plan Urbanístico de Egüés, últimamente integrados junto con otros 5 concejos de Egüés, organizaciones vecinales, políticas y sindicales, en la Plataforma Salvemos EGUESIBAR Zain Dezagun. Se trata de un Plan que va “evolucionando” y de las 10.000 vivendas iniciales ha ido creciendo hasta las 22.000 oficiales. Sabemos por los datos del propio Plan, que realmente son más de 30.000, manifestando públicamente el alcalde Sr. Andia (UPN), que la densidad “le parece escasa” a pesar de haber reconocido en el mismo momento que “no sabe las necesidades de vivienda.” A modo de ejemplo, diremos que el centenar de viviendas actuales de Badostáin, podrían convertirse en más de 15.000. Para sacarlo adelante se han cometido numerosas irregularidades, se ha evitado la participación ciudadana y de los concejos implicados, realizando maniobras rocambolescas para excluir a la nueva población de Sarriguren de todo debate y se ha llegado a mentir a los concejales de la actual corporación. Ha habido una ocultación continua de información que ha afectado incluso a las peticiones del Defensor del Pueblo. Se han censurado las informaciones al respecto en la revista del Ayuntamiento, cumpliendo tan solo con las correspondientes publicaciones en BON. Resulta curioso que en el propio programa electoral de UPN - Egüés, no se dedicara una sola línea para hablar del Plan, como tampoco se hacía para hablar de La Ciudad de la Seguridad o de la deuda de 7 millones de Euros, heredada de la época de Galipienzo, con el cual compartieron responsabilidades algunos de los actuales concejales de UPN del Ayto de Egüés y el propio alcalde. Ha sido un Plan impulsado claramente por una voluntad política que no ha dudado en desoir los criterios de los técnicos del propio G. de Navarra y que contenta a unos inversores, que muy bien asesorados, compraron los terrenos que se pretende recalificar. Llama la atención el desmedido interés en incluir una balsa en Ustarroz, en terrenos que pertenecieron a un concejal de UPN en Egüés.Tenemos sobrados argumentos para cuestionar su legalidad y así los haremos valer si llega el momento, pero debemos manifestar que, tal y como explicamos ante los responsables de Ordenación del Territorio y Vïvienda, consideramos una irresponsabilidad continuar con la tramitación. Lo que procede es comenzar desde el principio valorando necesidades y escuchando a las partes implicadas.
Sobre el proyecto PSIS de Ciudad de la Seguridad, el Concejo de Badostáin , propietario de 569.000 metros cuadrados, cerca del 25% del terreno, presentó diferentes alegaciones por motivos varios, al haber detectado que no está justificada su necesidad, así como numerosas inconcreciones especialmente en los estudios de tráfico, económico, inadecuada ubicación, falta de un estudio de alternativas, etc. Así lo han visto diferentes técnicos consultados que desaconsejan abiertamente este experimento. Sí hemos percibido claramente que se trata de un proyecto que en caso de materializarse, constituiría una barrera física infranqueable, no permitiendo la comunicación por sus viales con el fin de desplazarse hacia otros puntos. Resulta incompatible por tanto, con cualquier posible desarrollo urbano. Sobra decir que no hemos tenido en el Ayuntamiento de Egüés, facilidades para acceder a la información sobre este proyecto, pese a haberlo solicitado formalmente, ni hemos recibido comunicación alguna por parte del Gobierno de Navarra como propietarios de buena parte del suelo. Debemos agradecer al Ayuntamiento de Aranguren, una vez más, el habernos recibido y haber compartido con este concejo la información disponible.
Queremos expresar nuestra más absoluto rechazo hacia los políticos que, desoyendo criterios técnicos priorizan y favorecen los intereses privados por encima del bien común, deben abandonar la administración y dedicarse a otras ocupaciones, pero en cualquier caso lejos de todo lo que suponga gestión de bienes o dinero público. Esperamos que las instituciones sean capaces de reaccionar a tiempo y evitar que se consumen semejantes disparates. Por otra parte la situación actual de recortes en servicios públicos básicos no parece muy propicia para desarrollos de este tipo.
Como miembros electos y fieles al compromiso adquirido de trabajar por el bien de Badostáin, nos comprometemos a utilizar los cauces que consideremos adecuados para conseguir la paralización de estos proyectos.
Aprovechamos para pedir a la ciudadanía que se informe y exprese su posición al respecto.
